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lunes, 19 de septiembre de 2011

Como un Columpio

Creo que puedo describir como van cambiando mis estados de ánimos, soy como un columpio que va subiendo y bajando y vuelve a subir, de forma cíclica a velocidad constante y si aceleración.
cuando estoy en la cúspide del movimiento, cunado mi seguridad es máxima, cuando mi racionalidad puede ver el camino que está más allá de las rocas en ese punto tan álgido es cuando me siento mejor, pero está el vértigo de estar tan alto y por tanto, un miedo acompaña ese sentimiento de seguridad luego el miedo empieza a bajar las emociones y empiezo a bajar encaminada al valle, al punto más bajo de mis emociones, donde prefiero estar sola, donde no puedo dejar que vean lo más bajo de mi y la única solución es encerrarme en un rincón detrás de la risa que pretende mostrar que todo esta bien.
Luego comienzo a subir diciendo que esta actitud es tonta y sin sentido, que no hay motivo para creer que soy el último escalafón, la última opción.
Así va el columpio de mis estados de ánimo, no creo que haya descubierto algo muy grandioso, y tampoco creo que sea la única persona que le pase esto, pero creo que a mi edad esto ya debería estar superado, y que tengo el presentimiento que comienzo a marearme de este columpio y no se que pasará si sigo en el

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